Llega el verano, el calorcito, el ponerse morenos y… ohhh, no!!!
Acabas de descubrir que tú también eres capaz de hacer una metamorfosis, de pollo de granja a cangrejo de río.
Todos nos quemamos con el sol, en mayor o menor medida, dependiendo de como sea nuestra piel, pero el sol nos afecta y nos daña.
La piel es el órgano más grande de nuestro cuerpo y es la que se expone y nos protege de todas las agresiones externas que recibimos cada día. Por eso hay que cuidarla tanto y que no se queme es una forma de cuidarla básica.
Pero si además de protegerla de esas quemaduras no le añadimos químicos… pues mejor, no???
Es una forma de tener sana la piel que tiene que protegerte para que tú estés sano.
Algunos datos técnicos:
Pesa:
Unos 50g aproximadamente
Huele:
A sandía de verano
Contiene:
Cera de alba, manteca de cacao, manteca de karite, manteca de mango, oxido de zinc, cera de soja, aceite de almendras, aceite de coco, aceite de zanahoria y fragancia